La salida automovilística turística del Club de Coches Clásicos de Mallorca, del pasado 24 de marzo, fue organizado por G. Westphal y se concibió para celebrar la llegada de un coche extraordinario y duradero, sucesor del Escarabajo, el “nuevo” VW Golf. El primero salió de la fábrica de Wolsfburg a finales de marzo 1974, llegando finalmente a los concesionarios en agosto del mismo año, experimentado muchos cambios a lo largo de sus 8 generaciones.  El VW Golf siempre ha sido un coche inconfundible y duradero que sigue siendo fuerte hoy en día, en su 50 aniversario.

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Gastón había organizado esta salida del Club con mucho cuidado y atención al detalle, invitando incluso a varios Golf clásicos, entre ellos un VW Golf GTI MKI rojo, conducido por Enrique Carbonell, piloto oficial del rally, que trajo a su hija para que viviera la experiencia y aprendiera a ser copiloto. Otros invitados fueron Glasson Fitzpatrick y su hermano David, uno conduciendo el primero un Golf MK2 16V negro y el segundo un GTI MK1 blanco, respectivamente.

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La ruta se centraría en el centro y norte de la isla e incluiría todo tipo de carreteras.

Nos reunimos en un nuevo lugar, el restaurante & Tafona Son Catiu, que se encuentra al este de Inca.  Asistieron más de 25 coches con cerca de 50 conductores, y todos formamos una larga cola de coches frente al restaurante, que fue bastante espectacular.

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Salimos poco después de las 11 de la mañana, a intervalos de 1 minuto, con una combinación de instrucciones, pero antes de poder ponernos en marcha, tuvimos que responder a una pregunta relacionada con el VW Golf, que formaba parte de las puntuaciones para decidir el ganador.  En primer lugar, nos dieron copia del Roadbook original del tramo usado en el Rally Clásico Mallorca, con permiso de su organizador, Toni Dezcallar que nos dirigió desde Son Catiu, a lo largo de la Ma-3440 hacia Llubi, y luego Santa Margalida.  Este fue el final de la primera parte del rally de Gastón. 

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La segunda parte era unas indicaciones convencionales de carretera que enumeraban los nombres de los pueblos a los que debíamos dirigirnos.  Desde Santa Margalida nos dirigimos al norte, a Muro, luego al oeste, a Inca, y de nuevo al norte, a Selva y Caimari, donde recorrimos la Tramuntana.  Este tramo de la vuelta hacia Lluc y luego Pollensa, fue el más pintoresco y bonito del recorrido en coche.  También fue el más desafiante, ya que era una carretera estrecha y sinuosa, que subía en altura y con muchos ciclistas en ella, que circulaban por esta carretera de montaña.

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Nuestro destino fue en la bahía de Pollensa, en el restaurante Ca'n Josep Ca Vostra, que estaba en primera línea y tenía unas vistas preciosas del mar. La comida fue espectacular, con cada plato bien preparado y delicioso.  El frito mallorquín era excepcional. 

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Antes de poder entrar en el restaurante, Gastón nos hizo tirar a todos una serie de dados para ver si conseguíamos acercarnos lo más posible al 21, convirtiéndolo en una variación del juego de cartas Blackjack/Pontoon.  Junto con la pregunta anterior, y algunos otros desafíos, esto acabaría por determinar los ganadores.  El ganador de esta carrera de coches fue Hans-Peter y Elke Dinsing con su Austin Healey de 1957, en segundo lugar Glasson Fitzpatrick con su Golf 16V del 88 y en tercer lugar Mike Dawson y Angela Mayol con su Ford Anglia de 1966.  Enhorabuena a todos los ganadores y muchas gracias a todos por asistir a esta salida turística del Club.

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Por último, un agradecimiento especial a Gastón para la puesta en escena de una salida tan memorable y agradable y para la organización de una comida tan maravillosa y un restaurante increíble.  Gracias también a Helen Pitt por encargarse de la administración de esta salida turística del Club.